jueves, 25 de septiembre de 2014

Si todos los caminos llevan a Roma, ¿Cómo se sale de Roma?

"A veces pensamos demasiado y sentimos muy poco.
Mi abuelo siempre decía que si alguien quiere seriamente formar parte de tu vida, hará lo imposible por estar en ella, aunque, en cierto modo, perdamos entre pantallas el valor de las miradas, olvidando que cuando alguien nos dedica su tiempo, nos está regalando lo único que no recuperará jamás.
Y es que la vida son momentos, ¿Sabes? Que ahora estoy aquí y mañana no lo sé
Y que quería decirte, que si alguna vez quieres algo, quieres algo de verdad, ve por ello y nada más, mirando el miedo de frente y a los ojos, entregándolo todo y dando el alma, sacando al niño que llevas dentro, ese que cree en los imposibles y que daría la luna por tocar una estrella... 
A si que no sé qué será de mí mañana, pero este sol siempre va a ser el mismo que el tuyo, que los amigos son la familia que elegimos, y que yo te elijo a ti, te elijo por ser dueño de las arrugas que tendré en los labios de vieja, que apuesto fuerte por estos años a tu lado, por las noches en vela, las fiestas, las risas, los secretos y los amores del pasado. Tus abrazos, así por que sí, sin venir a cuento, ni tener que celebrar algo. 
Y es que en este tiempo me he dado cuenta que los pequeños detalles son los que hacen las grandes cosas. Y que tú has hecho infinito mi límite y así te doy las gracias por ser la única persona capaz de hacerme llorar riendo, por aparecer en mi vida con esa sonrisa loca, con ese brillo en los ojos capaz de pelearse con un millón de tsunamis... 
A si que no... No sé dónde estaremos mañana, no sé dónde estaremos dentro de 10 años, ni como se sale de Roma, no te puedo asegurar nada. Pero te prometo que estés dónde estés, voy a acordarme de ti toda la vida, por eso, mi luna va a estar siempre contigo, porque tú me enseñaste a vivir cada día como el primer día del resto de mi vida, y eso, no lo voy a olvidar nunca."



miércoles, 17 de septiembre de 2014

MI historia.

Ojalá yo fuese capaz de contarte nuestra "historia" escrita en primera persona del singular y del presente. Quizá así entendieses por qué me cuesta tanto apartarte del camino a pesar de saber que es lo que debería hacer.
No sé renunciar a tu encanto. A tu manera de hacerme sonreír... 
Eso no es lo malo. Lo malo es que me dí cuenta hace mucho tiempo, que tengo pocas posibilidades de salir bien parada de esta historia; y aún sabiéndolo sigo aquí un día más, avanzando.
Lo más valiente que he podido ser contigo ha sido para decirte que tú sabes que debería haberte apartado hace tiempo. Aunque en el fondo, no estaba convencida de sí de verdad eras consciente. Como tampoco sé por qué no lo he cumplido teniendo motivos de peso y a pares... 
No sé por qué has tenido que ser tú, ni por qué ha tenido que ser conmigo.
No encajo tus días de tomar distancia, aunque quizá los que no encajan son los que me gustan a mí: en los que estás muy cerquita.
A veces terminas mis frases cuando yo ni siquiera las he empezado; otras soy yo la que te sorprende poniéndole palabras a lo que tú estás todavía terminando de pensar.
Y a lo mejor es que el mundo tiene razón y esta conexión tiene que perderse. Pero a mí siempre me ha importado una mierda el mundo cuando una sonrisa se me ha colado y me ha calado en el corazón. 

miércoles, 10 de septiembre de 2014

Debilidades.

Y ayer escuché a gente ponerle nombre. No hablaban de ti, ni de mí; ni siquiera nos conocen, ni saben que existimos. Pero le pusieron nombre, y entonces por fin entendí qué narices me está pasando esta vez. 
Hablaban de debilidades, y desde luego, tú eres la mía. Personas por las que no puedes evitar sentir, personas que hasta sabes que no te convienen, que te hacen daño (consciente o inconscientemente). Y lo sabes, y lo asumes; y hasta decides alejarte en cierto momento para no seguir sufriendo; para que la herida deje de sangrar y empiece a cicatrizar.
Pero al final vuelves, porque tú vas y vuelves. Porque volviste una vez, y me convenciste (o yo misma te ayudé a convencerme) de que las cosas iban a ser mejor esta vez, iban a ir bien... Porque es cierto que durante un tiempo así fue. Que te aseguro que nadie fue más feliz en el mundo cuando pusiste fin a tu noche a las 8:00 de la mañana un día y me dijiste "Me meto en la cama ahora. Peque, me jode decirlo pero cada noche... Cada vez que me voy a la cama sueño que vienes tú, me despiertas con un beso, me abrazas y duermes a mi ladito... No sabes lo importante que eres". Y tenías razón, porque nunca lo supe, porque nunca llegaste a demostrarlo, y porque después de ese mensaje y unas cuantas horas después, cuando te despertaste, vino tu hacer como si eso no lo hubieses escrito nunca, pero claro, yo no pude hacer como que no lo había leído tampoco. 
Y cuando las cosas volvían a ir bien y cuando más cerquita de mí te sentía, otra vez pusiste tierra de por medio, volviendo a tirar por tierra lo avanzado, y eso que nos había costado construirlo mucho más que la primera vez.
Como no podía ser de otra manera, recoger mis pedazos también fue mucho más duro esta vez, como si los trozos fuesen diminutos, como si estuviesen rotos más profundamente... Cuando se vio afectado mi día a día y hasta mi salud, cuando decidí que esto era insano, que nadie había llegado tan lejos y que nadie merecía que yo sufriese tanto has vuelto a aparecer tú, con la mejor de tus sonrisas y el más profundo de tus abrazos... 

sábado, 6 de septiembre de 2014

Para mi lentejita y futura sobrina.

Y a día de hoy estoy llorando mucho princesa, me estoy quedando vacía. Para que cuando tú llegues sólo me veas sonreír.

miércoles, 9 de abril de 2014

Love... ¿Is in the air?

Va pasando el tiempo y las prioridades van cambiando. Más que probablemente son las propias experiencias las que nos llevan a ser más exigentes o cuanto menos, a no buscar lo mismo que buscábamos con aquellos primeros chicos/as que nos gustaron. 
Ya no necesitamos que nos digan "te quiero" antes de irnos a dormir y casi obligatoriamente uno al día.  
Ya no queremos ir de la mano de esa persona a todas partes.
No buscamos un amor de esos que te matan desde el primer momento, uno de esos en los que todo; absolutamente todo, es perfecto. Sin broncas ni malos momentos.
Hemos dejado de soñar con un chico que viene detrás de nosotras en todo momento, que nos abre la puerta del coche, que nos invita siempre a cenar, o nos llena de flores cada san valentín.
No creemos en princesas de cuentos.
Porque te das cuenta que hay cosas que no existen (ni falta que hace), que son otros muchos detalles los más importantes de todos. Porque tras unos cuantos chascos relativizas.
En cierto modo, y aunque no sea lo correcto, me vais a permitir que diga: ¡Benditos chascos! Porque sino más de uno seguiríamos esperando personas que sólo son reales en los cuentos. Y me he dado cuenta que yo quiero a alguien de verdad, con sus defectos y con sus manías. Alguien que sea capaz de decirme lo que no le gusta de mí, pero que se enamore cada día de mis cosas buenas. Alguien, que a pesar de todo lo malo (que lo habrá, y para exportar) elija quedarse conmigo.

Pero... ¡Qué narices! nos encanta escuchar un "te quiero" sincero, sentir que esas palabras son ciertas y que se basan en hechos; y no hay nadie más feliz en el mundo cuando, de repente, su mano se junta con las nuestra.

viernes, 28 de marzo de 2014

Recuerdos.

Vivo de recuerdos, lo cual seguramente es malo; pero es porque los tengo tan bonitos...
Hay instantes que me han valido años y hay meses que han estado vacíos, y muchas veces precisamente por la sensación punzante y dolorosa que dejan esos primeros al desvanecerse.
Sin embargo, volvería a revivir cualquiera de ellos, aun sabiendo el precio que pago después.
Abrazos de despedida que saben transmitir y van donde dos besos no pueden llegar.
Noches en las que te sientes parte de un plan perfecto y hecho a medida, calculado hasta el más mínimo detalle para que todo salga como debe salir.
Fotos junto a una fuente con personas muy importantes con las que te reencuentras, y otros tantos a los que admiras que hacen que estés allí. 
El significado de la palabra amistad, y personas que se ajustan perfectamente a ese significado.
He visto vestida de blanco a una de las personas más importantes de mi vida en su día, y sentir que ese también ha sido uno de los días más felices de mi historia.
Me he sentido querida, buscada, afortunada, he sentido que me han querido ver feliz, sorprender, ver y tener. He tenido bastantes "buenos días princesa", he recibido "te quiero's" sinceros. He sentido que han luchado por mí y mi felicidad. Me he ido a dormir con una sonrisa y sintiendo que mis sueños no podían superar la realidad. He llorado de alegría, me ha dolido la tripa de tanto reír, he dormido abrazada a la persona que quería. Me he sentido valorada, escuchada... 
Y es que yo no sé si pido poco, mucho o demasiado; pero sé que es lo mismo que yo estoy dispuesta a aportar.
Quiero más recuerdos de esos.
Quiero que cuando me quede algún viernes por la noche en casa me vengan a la cabeza todos estos pensamientos y darme cuenta de cuántas cosas he conseguido ya, y seguir adelante, y seguir buscando lo que me falta: seguir buscándote, aunque últimamente sólo  te encuentro en mis sueños.

martes, 11 de marzo de 2014

11-M


Parece increíble que ya hayan pasado 10 años porque recuerdo ese día con todo lujo de detalles. Recuerdo perfectamente cómo dimos la primera clase (educación física) porque la dábamos en el gimnasio un poco "aislados" del resto del colegio. Y como al subir al examen de biología nos fuimos enterando poco a poco de la magnitud que había tenido el atentado. Recuerdo perfectamente como viví cada uno de los momentos, como hasta la tarde no volví a casa y me enteré que mi tío solía coger ese tren habitualmente, pero que ese día decidió ir en coche a trabajar. 
Recuerdo y sigo teniendo la misma impotencia que sentí aquellos días, sigo sin entender como se puede organizar fríamente el asesinato de tantas personas inocentes, personas que jamás habían visto y que por tanto, jamás les podían haber hecho nada malo. 
Ese día una parte de todos nosotros iba en esos trenes. Una parte de nosotros se fue para siempre aquel día junto a las víctimas.
Ese día, se demostró también que todavía queda gente buena por el mundo. Bomberos, médicos, taxistas, y personas de a pie que simplemente pasaban por allí aquel día, y no se pensaron dos veces el meterse de lleno en aquella tragedia y dar todo lo que podían de sí mismos para ayudar. Supongo que una persona no sabe bien cómo reaccionaría ante algo así hasta que no se viese en la situación; pero me parece un acto de generosidad increíble, porque lo que vieron y escucharon supongo que es algo que todavía no han podido olvidar, y seguramente sus vidas han quedado marcadas para siempre. Pero en ese momento ayudar, salvar a los que pudiesen, estaba por encima de todo. 
Jamás les vamos a olvidar. Una parte de nosotros se fue con ellos, pero una parte suya estará con nosotros para siempre. 

sábado, 8 de marzo de 2014

Eso es vivir.

"Enamorarse. Reírse hasta que te duela. Una ducha caliente. Nadie delante de ti en el supermercado. Un mensaje. Escuchar la lluvia caer. Un café caliente. Una llamada. Los viajes en coche. Tener un sueño bonito. Ganar un desafío. Coger de la mano a alguien que quieres. Oír las risas de tus amigos. Encontrarte por la calle a un viejo conocido. Ver amanecer. Hacer un regalo. Despertar y ver que aún te quedan horas para levantarte. Escuchar de manera casual a alguien que dice algo bonito sobre ti. Eso es vivir..."

jueves, 6 de marzo de 2014

Sin pedir permiso.

Y sin pedir permiso, se ha colado también en sus sueños . Por si fuese poco luchar a lo largo del día contra todo pensamiento en el que de repente, se cuela ÉL. 
Lo peor es que se despierta con una sonrisa, hasta que se da cuenta que nada de eso es real, mira el móvil y por supuesto, no hay ninguna novedad. 
Lo que propició que la situación fuese fácil ahora se ha convertido en todo lo contrario; es precisamente eso lo que no le deja dar un último, y casi desesperado, paso; eso es lo que le impide jugársela y decirle toda la verdad y luego ya que salga el sol por dónde sea... 
¿Y qué pensaría él si lo supiese? ¿Cuál sería la reacción? 
Si no hay nada que pueda impedir que se vuelva a colar en sus sueños por la noche, por suerte, los pensamientos a lo largo del día se pueden controlar, y el mantenerse tan ocupada lo hace más fácil. 

lunes, 3 de marzo de 2014

Quince.

No me gusta nada cerrar los ojos y verte. Me molesta profundamente buscar entre todas las caras, para ver si por casualidad aparece la tuya y me alegra la noche. No te agradezco para nada que me hayas devuelto esa sensación tan bonita, que pensaba que sólo se tenía con quince años. Odio que sea viernes por la noche y ya esté pensando en el fin de semana siguiente para ver si esa vez tendré más suerte y aparecerás. Me jode porque nadie te esperaba ni te buscaba. Me fastidia enormemente porque parecía hecho aposta, el momento y el lugar exacto, cualquier aleteo de mariposa hubiese cambiado la historia por completo. No quiero esperar nada de ti, porque no hay promesas, ni las he pedido. Me da rabia porque si tienes la oportunidad y no sale, te haces a la idea. Siento mucha impotencia porque si te dan un "no" pues más de lo de antes. No lo entiendo, porque te pones "nervioso" como un quinceañero tú también. [...]

Continuará...


domingo, 16 de febrero de 2014

A una de las personas más importantes de mi vida.

¡Muchísimas Felicidades! 
Una de las pocas personas que me lee y a las que dedico entradas, él tiene ese "privilegio", y otros tantos más. Es de esas pocas personas que año tras año sigue ahí, al pie del cañón. Quizá no soy la persona con más amigos en el mundo, pero desde luego me siento muy feliz y muy afortunada por los amigos que tengo y que me acompañan en cada paso. 
Se hace un poquito más mayor alguien que para mí siempre va a ser chiquitito, porque es como mi hermanito pequeño; aunque muchas veces él ha tirado de mí como si fuese el hermano mayor. 
Una persona a la que nunca le voy a agradecer lo suficiente TODO lo que ha hecho y hace por mí, incluso, lo que va a hacer, porque tengo la seguridad de que seguirá haciendo muchas cosas más por mí. 
Ha conseguido emocionarme con cada cada carta y con cada vídeo. Ha conseguido hacerme sonreír cuando era lo más difícil del mundo; me ha ayudado a salir del golpe más duro que he recibido. Está ahí cada día, día tras día. 
Y además, voy a tener la suerte de hacer esto todavía más fuerte cuando se venga a vivir aquí. 
Creo que es complicado que una persona que llega así a tu vida te llene, pero él ha superado todas mis expectativas. 
Espero que tenga un día más que precioso, que reciba muchísimas felicitaciones bonitas y especiales, de las personas que él quiere. Y le recuerdo que mañana, igual que hoy, estaré ahí, intentando que siga sonriendo, y que todo le vaya lo mejor posible, porque me ha demostrado que merece que yo luche por él y por su felicidad hasta el último aliento. 
Porque te prometo que voy a seguir aquí mañana, y el año que viene de nuevo para felicitarte; y el siguiente, y el siguiente, y el siguiente... 
Te quiero pequeño!

martes, 11 de febrero de 2014

Con sabor a sábado.

En el momento en que llegas a casa, cierras la puerta y SONRÍES... En ese preciso momento piensas cómo narices se supone que has estado llegando a casa el resto de días, porque se suponía que también habían sido tiempos felices y buenos.
Casualidades, siempre casualidades te llevan a nuevos comienzos. Cuándo y cómo menos te lo esperas alguien se gira y te ofrece un chupito, por ejemplo. O con las mismas, te pregunta si eres hermana de...  y se sabe hasta tu nombre. Siempre en el momento preciso y adecuado, porque anda que no hay mesas, y anda que no hay bares... Y para que te sigas preguntando cómo es posible, siguen las casualidades y se acaba en un lugar diferente pero de nuevo con esa misma persona.
Yo creo que mucha gente puede sacar lo mejor de ti, y creará noches de esas que no se olvidan. Pero no todas las personas pueden hacerlo, y muchas de las que pueden, no lo harán. 
Por eso dame un señal y me la juego.
Da igual si todo forma parte de un plan o es casualidad, porque la sonrisa, al cerrar la puerta, fue mía, pero tú hiciste que estuviera allí.