miércoles, 20 de marzo de 2013

El hombre de mi vida.

La gente se pasa la vida buscando el hombre/mujer de su vida, alguien que esté a su altura, alguien que sepa quererles, cuidarles, respetarles. Por eso, yo ya lo he encontrado. Lo encontré hace 23 años y pico, exactamente el tiempo que él lleva en mi vida (o yo en la suya más bien).
Dudo mucho que alguien me quiera, me cuide, me aguante, me transmita tanto, me mime, me regañe, me escuche, me aconseje, me arrope, me abrace, (...) como lo hace ÉL.
Es una pieza más que fundamental en mi puzzle. Es mi intocable, mi debilidad, mi ídolo. Es mi papá.
Le adoro aunque me saque de quicio a veces, aunque odie que no me deje hacerme un piercing, o que haya sido siempre tan "chapado a la antigua".
Lo es todo, y sonrió más fuerte cuando le veo sonreír a él.
Es, y será siempre, la persona más importante de mi vida. Nadie, jamás, llenaría su espacio.
Y por eso, tengo muy claro que cualquier día me vuelvo loca y grabo en mi piel algo que tenga que ver contigo.
Porque mi vida sin tí no tiene sentido.


lunes, 11 de marzo de 2013

11-M

reflexionando en "voz alta".

Hace tan solo una noche, podía haber escrito una entrada sin tan siquiera una pausa, pero ahora no encuentro las palabras. Miraba esa mesa y me sentía apuñalada. Da igual el tiempo que pase, y claro que por otro lado esa misma situación hace un año me hubiese hecho pedazos... Y eso me ha hecho darme cuenta que inevitablemente hay cosas o personas que nos marcan. Personas que creemos de una manera y que por mucho que la vida las aleje de nuestro camino, si las vemos, y las vemos actuar de una manera que no encaja con esa imagen que tenemos de ellas: nos duele y nos trastoca. Pero no es tiempo de explicaciones, en el fondo da igual... Pero espero no encontrarme de repente participando en una conversación o compartiendo risas con alguien que me haya intentado hacer tanto daño: a mí, y a personas tan importantes para mí.